Niño

Entra el mundo disfrazado de un niño vagabundo,
qué esconde sus pecados en lo mas profundo de su alma.
Nadie lo sabe, nadie lo imagina pero de noche es un ave por placer y disiplina.

Hoy ésta perdido y el aire lo ahoga.
Quizás sea un recuerdo, un suspiro,
un olvidó qué le abraza el cuello cual soga.

No tiene conciencia y su cuerpo se rinde.
Quizás sea su inocencia la qué lo asesine.
Pero nadie lo nota, nadie se deprime,
si el pobre niño muere y los tiburones van vestidos de delfines.