Nocturno

Noche de ensoñaciones, noche azul y romántica.​

¡Ah! Como retumba mi pecho cuando recuerdo tu tórrida pasión. Y la quimera sabe que estoy poseído, poseído por aquella fiebre, por aquel delirio santo, ¡el delirio del amor magno!


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Rayo trémulo cuasi sombrío de algún Edén arcano, que bañas mi rostro y unges mi alma, y nimbas mi tristeza con un halo púrpura, con un halo de remembranzas de argento y azahar…


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Y ensueño a través de este cuarto de luz mortecina, a través de este orbe de penumbra y renuncia. Y me besa Afrodita y me acaricia Artemisa, y me envuelvo en un manto de deseo mordaz y llueve, llueven plumas fulgúreas de fénix inmortal…​

¡Deliro! ¡Deliro como un enfermo de amor! Y veo a la musa por doquier, a la bella, a la diosa, a mi edén, a mi averno…


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¡Oh, Lirio, Lirio mío! ​

Mundo de un ensueño irisado… Ponto de una pasión encrespada… Éter célico en donde resuenan los coros arcanos de los querubines divinos.​

¡Oh, Lirio, Lirio mío! ​

Astro de algún cosmos lejano, del cosmos distante del amor prohibido…​

¡Oh, Lirio, Lirio mío!



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L. ESTEBAN TORRES
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Aplausos sonoros, por la temática, el ritmo, el versar... place ponerle música a tan elaboradas letras.

Es una bella obra.

Dragon Ecu

 

muchas gracias, me place mucho poder compartir mis letras en esta increible página, espero aprender mucho de todos ustedes, poetas!