Odisea Blanca

A Romina

Conozco tu cuerpo a grandes rasgos cuando lo dejas prendido
en el aire como una filigrana blanca que se resiste a dejar
su cuerpo de nube.
Te conozco cuando dejas pedazos de sombra regados
en forma de huellas para que mis ojos lo calcen
para que mi piel la mida cuando el sol se deja ver desnudo.
Ahora tengo entre mis manos tus senos
los sopeso
hasta hacerlos mejillas;
muerdo tus gemidos para hacerlos rayos con la única intención de que su luz haga ver la desnudez del mundo cuando caen tus deseos sobre el pétreo silencio, haciéndolo arder.
Ahora estoy encima del día y su cresta me lleva hasta ti
hasta la última partícula en tus sábanas
y tu cuerpo se escarcha
como un cosquilleo de cobre cuando se hace de tarde en el rio.
Por eso
mis besos se pegan y sólo rasgan
el pudor de tu vientre
y caigo como un sonido elemental que busca nido
y mi espalda se hace ola y te deja rendida sobre mi boca.
Así llevamos la cópula en los labios
la ardencia rayando la piel
el tintineo de los sexos
el éxtasis bajo sombras...

 

Muy amable Eban. Saludos.

 

Muy amable cariño. Besos.