Palabras mudas

Decisiones que no son propias​

Y un individuo que se divide​

Reacciones que son obvias​

Ante una exigencia que no mide​

No esperes de nadie su compasión​

No comparten el sacrificio sólo la felicitación.​

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Complacer a todo el mundo no es un camino viable​

Lleva a la locura, te vuelve manejable​

Observa mejor​

Que los sueños son escasos​

Puedes disfrazar con una sonrisa los más profundos fracasos​

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Buscando la aprobación ajena​

Te consume la frustración​

Siempre incompleta, con un vacío​

Que asigna el castigo merecido​

Me encuentro desorientada​

Y hoy tan joven siento que no he logrado nada

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Y mientras más me pierdo​

Más lo disfrutas​

En la distancia encuentro paz​

Y en tu silencio hipocresía​

Es claro el daño que producía​

Tu desinterés mientras crecía​

Son tus deseos de olvidar
​

​

Mis logros son menospreciados​

Pisoteados con sutileza​

Realmente admiro esa destreza​

Tus consejos malintencionados​

Controlan mi cabeza​

Mi autoestima se ha quebrado​

Por tus juicios personales​

Y te beneficia mi torpeza​

​

Dudo de mi capacidad​

De mis buenas intenciones​

No le das el mismo valor​

Si no cumplen tus condiciones​

Pero encontré la fortaleza​

Para no abandonar​

Mis pasiones​

​

 

Muy interesantes versos los que nos dejas, querida amiga. Sin duda el causante de tales comentarios es un ser tóxico, que solo te provoca daño. Conviene decir que el escribir sobre esto, es una catarsis que te permitirá salir adelante.
Felicitaciones por tu obra.
Un saludo de
Rodrigo del Río

 

Susurra a tu corazón
cuánto lo quieres.

Reflexivos versos.
Un saludo.

 

Seguro que encontrarás esa fortaleza para poder sentirte libre.
Muy delicado y sentido poema.