Pataleta

Me duele
y es sordo el dolor,
no escucha nada,
sólo vive en mí como alimaña
que parásita me come las entrañas
y hace de mi esperanza su festín.
Me golpea,
sin previo aviso,
y pierdo la risa y el tino,
el andar y el camino,
y el coraje de luchar.
Por momentos,
me desgarra y me atormenta,
me tumba y me marea,
como si dentro de las venas
en vez de sangre tuviera
un millón de granos de arena
que me laceraran al pasar,
como sádico reloj de arena
que me anunciara mi final
a cada grano que cayera
para no volver nunca más;
así,
así me duele el soñar.

 

Pero si soñar es bello no comprendo que te duela... Una sentida pataleta amigo, muy creativo. ABrazos

 

Cuando lo que sueñas es imposible, a veces duele. Gracias por tu pasar y tus palabras que hacen hollar bajo mis letras. Un abrazo, Brise.