Peregrinando.

Un gesto sin sonrisa
una mirada perdida
el sol sobre tus hombros
y el frio en tus rodillas

las pupilas sobre el horizonte
vacilan profundas peregrinas
un lejano olor a monte
me recuerda por que el caminar constante

con la anaranjada semiesfera
se me marcha otro día
se llena de olor a sal el aire
es tan grande el charco
y son tan pequeños mis brazos
hasta aquí llegaron mis pasos

Pero luego te escucho cantando
Estas sobre la colina
Y tu voz sabe pasto
Salto sobre el azul profundo
y me sumerjo en el mundo

la canción es más fuerte
mientras mis piernas sienten el cansancio
el asfalto esta cuarteado al igual que mis pasos
pero en frente están tus profundos ojos
esperando verme llegar cantando

 

Hermoso peregrinar por tu poema.
Un placer, saludos.