Perspectiva hermética

Por favor mantén quieta e incólume mi aurora,
sabes que puedes irte y volar con alas propias
pero recuerda, el imán debe estar intacto
para no desvanecernos con la facilidad del humo.


Ahora cae el espacio entero a mis pies
mientras tus ojos se mantienen flotando
como burbujas del metal más sólido,
y me castigarán por negarme a ser libre.


Caminaré por inercia mientras no estés,
tu serás irreprensible e intocable
en esa pequeña delicadeza que te rodea;
yo me disfrazaré de piedra inmóvil al anochecer.


Si logró resurgir entre las cenizas
prometo volver a buscarte y gritar la verdad,
que es siempre necesaria;
y pondré replay para retroceder la película.


Hasta ese entonces, vomito a cada instante mis pensamientos...

 

Ahora cae el espacio entero a mis pies
mientras tus ojos se mantienen flotando
como burbujas del metal más sólido,
y me castigarán por negarme a ser libre.

Grandiosa poesía excepcional. Maravilloso talento. Felicidades.

 

El imán nunca se equivoca de materia, de manera que el cerrar y desprender son parte de la misma dinámica y el único dinamo es como se indica: de dos, aunque está adentro de uno en libertad hermética. Un saludo.

 

Un poema hemoso. Me ha gustado mucho...felicidades! Un saludo.

 

Muchísimas gracias por tu comentario Ricardo, un abrazo.

 

Gracias por tu comentario Arkhazul, un abrazo.

 

Gracias por tu comentario Lou, saludos.

 

Que gran comentario Arkhazul, muchísimas gracias.