Poesía invertida

Las grapas del cuaderno empedernido,
el soplido del viento en la veleta adúltera,
esa estrella remota que no brilla
-el cielo es el mejor engañabobos-,
o la extrapolación del Polo Norte.

Búsqueda de sentido y de sentidos,
astro(s)labios.

El visionario, sabe a iluminado
desde el sol del balcón de las sirenas,
odisea de Júpiter fuera de su órbita.

-Te beso, te desnudo, te sublimo,
para luego lamerme los testículos-
-y robarte el placer de lo robado-.
-Mientras olvido y cuido el tesoro que es Dios y mis conductas-
-conclusiones que afectan al problema-
-La mujer que recorre las líneas de mi mano-.