Poetas

Un lápiz y un cuaderno, la luz mala
danzando sin saber bajo la frente
la ojeada angelical del insurgente
que quiere hacer su huerta sin la pala.

El metro, la metáfora y la bala
de la rima atacando su consciente
y el viento caluroso del demente
levándolo en su sueño como un ala.

¡El fondo del papel! ¡Y no hay un poso!
No sirven ni los ruegos ni las hachas
y grita el ¡Quiero ser! Como un suicida.

Contesta su inconsciente victorioso
"Haz como el sibarita de bombachas
..así coge el poeta con la vida".​

 

A mi juicio, Sergio, el soneto está perfecto en fondo y forma (empleando la sinéresis en "ojeada"", perfectamente aceptable, el oído, al menos el mío, la acoge bien). Me evocas al poeta desesperado por construir algo hermoso con su pluma, y como si no vinieran las Musas en su auxilio, y con lo de ""el fondo del papel y no hay un poso" me sugiere que necesita uno o dos vasos de vino para inspirarse. Bueno, son conjeturas que me hago, jajajajajajaja.
Un abrazo, querido amigo.