Porca miseria.

¡ Qué barbaridad ! Cuántas cosas terribles pasan en el mundo.
Yo me quedo en mi mente. El pecho ( lo vasto ) y la cabeza ( lo profundo ).
Así lo ven los budistas. Pero los científicos estudian el cerebro.
Mente analítica y mente reactiva. Nuestros impulsos atávicos. El complejo de superioridad o Ego.


Analizamos fríamente, la situación. Con tranquilidad. Eso ocurre en el córtex cerebral.


Y si reaccionamos instintivamente, eso se debe al interior del seso.
Celos y envidia, por el Ego, y el discernimiento entre el Bien y el Mal.
Imperfección, pero también, la posibilidad de evolucionar y de crecer, si uno tiene una vida longeva.
Te envidio si veo que algo se te da bien, y a mí, mal. Algo es algo. Soy un poco animal, por consiguiente.


Y así es el ser vivo, también llamado unidad biológica de consciencia.





¿ Por qué tanta violencia y ensañamiento en Honduras, Guatemala y el Salvador ?
¿ Por qué las maras o pandillas armadas ? Violación o ultraje, y secuestro.
¿ Por qué emigrar hacia los Estados Unidos, pasando por México, lindo y querido ?
Donde los traficantes de seres humanos vuelven a enriquecerse, con los pocos ahorros que quedan.


Traumas y traumas. A nivel físico y psicológico. Los emigrantes sufren y callan. ¡ Porca miseria !

 

Porca miseria desde luego, la culpa de todo la tienen las malditas fronteras, imagino un mundo sin ninguna de ellas, un solo país llamado planeta de libre ciculación total. Visión utópica casi, podría ser posible, los nacionalismos matan la libertad del individuo, he dicho, amigo Nommo. Me gustó tu reivindicativo y social poema. Abrazote vuela. Paco.

 

Gracias, Paco.
Es que leí una revista editada por Médicos sin Fronteras.
Y me impactó.





Cómo las obras de Caridad, hoy en día, son muy difíciles de llevar a cabo.
Pero efectivamente, sin fronteras, nos iría mucho mejor.