Post Mortem

De tus venas se derrama
el más precioso veneno
que baña con ternura
el renaciente jardín
que recibe amable a tu cuerpo

Observas el cielo infinito
imponente en su grandeza
buscando una respuesta
como si las oscuras nubes
trazaran palabras en él.

Tomo tus manos
frias y sin intención,
las invito a acariciarme
¿Por qué te niegas a
aceptar mi cariño?

Tus labios,
me incitan a ser besados
mientras su color se esfuma
con el pasar del tiempo
con la llegada del dolor

Me cobijo contra tu pecho
tan blanco, tan puro...
quiero volver a escuchar
latir tu corazón
y tu suave respiración.

Por que después de la muerte
esta sierva de tu amor
es más fuerte aún
siempre lo repetí,
donde vayas yo iré contigo.

Mi cuerpo se une al tuyo
en un abrazo sin calor
en un beso sin pasión
en una herida que cruza
mi pecho y sangra por ti.

Aqui me tienes, a tu lado
el imponente cielo nos mira
se acerca cada vez más
cegándome hasta encontrar
esa mirada, que creí perdida.