Ropa reggae

Otra vez nos encontramos en la obscuridad,
hay pequeñas luces que de tu sostén,
juegan con la pupila de mi ojo mar, azul para
tu café pezón y un raro color en tus labios,
un tono miel se va tropezando de tanto beso borracho,

podría dejar de amarte, para escribir este momento,
al escribir sobre algo que ha tocado mi cuerpo,
mi mente viaja, vuelva, es como un globo
que va recorriendo bodegones, problemas , tormentas, las tardes
de una ciudad enamorada de sus mismas tardes,

es que en verdad eres hermosa, pero las tardes,
las noches de luna indecisa, precisa cuando alguien hace el amor,
romántica y seductora, anaranjada, blanca y escurridiza,
es la luna, que hoy nos canta, las nueve veces que
en la cama has sido mía,

puedo seguir, contarte cada rincón que mi ojo cámara,
ha guardado en mi cerebro, proyectarte con besos lo mucho
que mi boca ha vivido, dejemos la ropa, andemos solo con el cuerpo como abrigo,
amemos ese amor que nos motiva a dar el siguiente paso, a superarse,
yo amo la poesía como morderte los labios,
es un sabor inolvidable, escribir, como tenerte en mis brazos,

amor por amor, al arte con tu cuerpo, besarte causa recuerdos,
habrá habido mil historias de sexo, fuga de miradas y deseos,
pero mujer, no hay quien haya escrito antes, lo que tu piel y mis versos,
escribieron al amarse.


Pepe Barragán

 

muy bello tu poema un gusto pasar por tus lineas

 

Gracias poeta, un saludo

 

gracias, un abrazo y saludo

 

Pepe: me ha gustado ese bosquejo de originalidad que está inmerso en tu poema. Te aconsejaría bajarle a los adjetivos para que tus versos adquieran más fortaleza. Un abrazo.