Semanas

El sauce ya no existe, tampoco aquellas palabras, aquellas frases, ni aquel amparo.
El sauce y sus letras, están ausentes, cada cual en su tiempo y en su espacio.
Las hojas no pronuncian ningún verano, sus palabras no calman ninguna angustia.
Cada semana llega, sin su abrazo y sin su nombre.
Otros árboles han muerto, los sueños nacen y mueren, los poemas nacen y no mueren, el sauce está muerto, ¿sus palabras también?
Madera y frases con mucho contenido, madera y frases una misma sustancia, música muy tenue entre las ramas, recuerdos, sólo recuerdos, cada semana se repite como en un espejo.
Aquellos días, aquel sauce, aquellas frases, no vuelven sino en sueños.


nova

 

Precioso, hermoso, estremece de la hermosura, muy bonito.