Serena

El fresco de tu clima por mi cara
me invita a regresar otro febrero,
y acepto como el alba y su lucero
si estás con ese amor, Guadalajara.

Preguntas otra vez si me quedara
perdido en tu pasión con gran esmero,
y acepto entre el azul del agavero
si estás tan señorial, Guadalajara.

No digas más, mujer, no digas más;
tu aroma de tequila me encadena
y me hace regresar a donde estás.

No digas nada, cuerpo de sirena;
espérame en tus brazos y tu paz,
y quédate serena, muy serena.
​

 

Buenos versos bien hilvanados, dejas en ellos la promesa de regresar al lugar donde esta la musa que te hace escribir este poema, un gusto leerte amigo, saludos.

 

bello y encantador tan natural como nuestro origen, siempre es grato pasar por tus sonetos, mi estima excompa, besos

 

Muy bien por tu soneto, fantásticamente construido y enfatizado ese canto a la que debe ser una bonita ciudad. Mis felicitaciones por este soneto.
Un saludo desde España.

 

Entre la majestuosidad de la ciudad
y la excelsa cadencia de los versos,
es un deleite pasar por tus poemas.
Estrellitas armoniosas.

 

Excelente soneto muy bien elaborado, con la fuerza y temperamento necesario para ensalzar a tan noble y bella ciudad (que lamentablemente la conozco en fotos)
Brindo con Tequila sin sal!
Saludos, abrazos y un gran retorno.

 

¡Muy hermoso!
besos y estrellas
Rosario

 

Ostras Jesús, siempre consigues hacerme reír. Tienes un humor finísimo y una gracia solo comparable a tu calidad literaria. Te mando un abrazo. Luis