Sin ausencias

Esta tarde puedo percibir...
sentir la brisa de la vanidad
y el ocaso de una fantasía,
como lavar las culpas a través de poesias.
Seguiré creyendo en un amanecer,
en una luna que existe en el cielo de un corazón que ama!
Dios!
iluminina los dedos que escriben unos versos sin causa,
que encarcelan con voces y son mortales lanzas..
Hoy,
descanso en remanso de la cordura
que regresa a mi alma,
en la belleza de una tarde de suave lluvia,
libre de una ironía que me ataba..
Hoy, hay lluvia en mi alma,
que moja, que embebe
el desierto de penas por una mente sembrada.
Puedo flotar y sentir las suaves plumas del viento.
a lo lejos diviso el contraste de la tarde que se aleja,
y la joven noche cercana.
Luces y estrellas iluminan senderos
largos inmersos de esperanza
hoy, se viste de colores mi melancolía.
Hermosos destellos como luciernagas van y vienen,
camino hacia ellos..
titilando corren y juegan con mis manos de lluvia,
ellas ya desgastadas quieren fugarse en el horizonte,
detrás de las luceirnagas que se alejan..
sus ojos que ya nos los de lunas repetidas aguardan en silencio,
a veces tristes por el recuerdo,
otras alegres cuando sueñan..
Tiempo de voces ausentes,
espacio que regresa,
Oh Dios!
perfecta conciencia,
designio que alcanza.​

 

Muy hermoso poema!
Como tú has dicho, siempre habrán destellos de colores que vistan la melancolía!!
Fue un placer leerte.
Un fuerte abrazo.

 

Gracias amiga, así es, por eso existimos en esa dualidad..
Un placer compartir mi sentir.
Ijanet