Tauromaquia

Queda, en la plaza, el polvo de rodillas,
polvo que antes partiera, levantado,
de bufa a bufa con rigor ritmado.
Quedan dos cuernos para dos mejillas.

Quedan dos mofas para dos sencillas
vueltas que diera el toro de asolado
lomo, porque la pena quema al lado
del sol que queda para dos costillas.

Queda el torero y el estoque queda,
torero que me diera amoratada
la estrella, con su estoque de la muerte.

Queda aquí, y al final, cuanto depreda
a esta piel ya muy bruna y muy cansada
que guardara en su pelo ni una suerte.

 

muchas gracias por leerme!!!, la tauromaquia me parece un ubérrimo campo simbólico

 

Si la tauromaquia es arte, el canibalismo es gastronomía fina. Saludos.

 

hola, estoy de acuerdo contigo! desconozco las razones por las que usted desaprueba la tauromaquia, pero a mí me parece inmoral causar sufrimiento animal solo por diversión humana. en mi poema no trato de hacer apología a las corridas de toros, de hecho, si se indaga en la analogía uno se da cuenta de que el toro (el humano) es representado como víctima de un cruel e indiferente torero (la vida). no veo algún problema en usar la tauromaquia como imagen poética para expresar esto; del mismo modo que, a pesar de reprobar la guerra, no niego a los artistas que la toman para expresar el sufrimiento humano. muchas gracias por leerme.