Tiempo perdido...

De ningún lugar venimos, a ninguna parte vamos,
y en certeza a nuestro paso nada queda sino olvido;
¿para qué tantas carreras? ¿para qué nos obcecamos
en luchar contra molinos y en ganar tiempo perdido?

Ni siquiera somos dueños de la carne que habitamos,
cualquier falso iluminado nos derriba de un soplido;
lo mejor que hay en nosotros, por placer, lo eyaculamos,
y tan sólo dedicamos nuestro esfuerzo a lo prohibido.

Nos marchamos de este mundo con el rabo entre las piernas
vomitando mala baba contra todo el que podemos;
destrozamos sin saberlo nuestras glándulas internas

y perdernos por orgullo cualquier rastro de conciencia;
¿cómo vamos a ser libres si morimos y nacemos
suplicándole al demonio que nos trate con clemencia...?

 

Sí, perdemos el tiempo, y el rebaño, además de gregario y acojonado, se cree bien puesto al día, cuando no hace más que rumiar la alfalfa sistémica que le suministran por el pesebre mediático los perrodistas de marras. Tiene huevos, pero se veía venir, inevitablemente, aún cuando existen focos de resistencia e información valiosísima para poner en solfa este delirio transhumanista.

Para construir el sujeto transhumano, decían los textos de la universidad, había que deconstruirnos primero, y para ello es necesario dinamitar la base moral, la familia, la identidad sexual, la nación, la raza, la natalidad (el neomalthusianismo de Gates y su Planned Parenthood para promover el aborto bajo el término de "derechos reproductivos"), la historia, el concepto de naturaleza, el cristianismo etc...
Recuerdo a teóricos tan interesantes como nauseabundos, a lo Butler, Haraway, Foucault... las maniobras biopolíticas de este último, o la hegemonía de Gramsci para hacer colapsar el sistema desde dentro, y la otra cara de la moneda, con la sociedad abierta de Popper a la que Soros es tan aficionado. Todo lo que pasó hace unos años en los departamentos de humanidades, sucede ahora con ese gran caballo de Troya del covid, y John McAfee ya no está aquí para hacer más antivirus...

Amarás tu esclavitud.

Agradecerás tus cadenas.

Te someterás por tu bien y el de los demás.

O de lo contrario... serás excluido, serás un paria, serás vigilado y castigado.

Perdemos, Ramón, el tiempo, ya lo sabías, y yo también y, sin embargo, habrá voces siempre clamando en el desierto. Al final, todo este disparate, todo este camino al infierno empedrado con "buenas intenciones", tiene enfrente algo que lo derrotará un día: la realidad.

Decía Abraham Lincoln que no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo. No sé si se equivocaba, aunque sí sé que Mark Twain no lo hacía cuando dijo que es más fácil engañar a la gente que convencerla de que ha sido engañada.

Evento 201, contigo empezó todo.

Buen poema, como siempre.

Un fuerte abrazo

y feliz NAVIDAD

 

Querido amigo, cómo se agradece escuchar la voz de la inteligencia en estos tiempos de idiotez suprema. Qué maravillosa y precisa descripción de los hechos la que has expuesto, no podría decirse mejor. Lástima que el rebaño ya sólo es capaz de escuchar la voz del pastor que le conduce al abismo, sin plantearse que este pueda ser capaz de traicionarle.
Amarás tu esclavitud...
Agradecerás tus cadenas...
Te someterás por el bien de los demás...
Odiarás al que no se someta...
Te irás del mundo sin saber para qué viniste...
En verdad te digo que me considero un hombre afortunado (seguro que también tú) porque, aunque nos matarán igualmente cuando así lo decidan, conocemos la verdad, y con ella por bandera, moriremos de pie cuando nos llegue la hora en lugar de arrodillarnos para suplicarles clemencia.
La frase de Marc Twain, tan celebre como acertada, cobra en estos días una dimensión extraordinaria...
Feliz Navidad, querido Carlos. Celebro y aplaudo tu clarividencia

 

Hace mucho, mucho tiempo, me tomé la pastilla roja, desde entonces, mi porcentaje de amistades bajó hasta el 1 %, (no serían tantas mis amistades) las cosas son como son.



No sé qué vamos a hacer sin Morfeos.
Lo único bueno, es saber que no soy el único.

 

Me encanto tu poema no falta verdad en nada de lo que dices en él, un abrazo

 

Quizás solo venimos para allanar el camino de quienes vienen más atrás.
Un abrazo, Jorge.

 

Manolo, estás loco... te tomaste la pastilla roja? Oh, cielos, estás perdido!!!!!!!
Como dice mi madre... "El Señor que te ampare y la Macarena que te guíe..."

 

Gracias, Ramón. Un honor que te gustara, ciertamente somos entes raros...
Un abrazo

 

Sí, como hizo Juan el Bautista...
Otro abrazo, Sergio

 

Qué grande y reflexivo lo que acabo de leer, Jorge!
Lo sabemos, lo decimos, pero somos unos p_ _ porque siempre caemos en la misma.
Excelente!!
Abrazo fraternal

 

Excelente. Reflexivos versos. Pero no esperes que los alcornoques den peras. Un abrazo.
Miguel

 

Lo que ocurre, César, es que el mal es mucho más accesible que el bien. El ser humano es poco dado al esfuerzo, además de mentiroso compulsivo. De puertas para afuera es un dechado de virtudes, pero por dentro está podrido de maldad. Y así le va...
Gracias por pasarte, amigo. Un Abrazo

 

No, por supuesto. Siempre darán alcornoques, jajajajaja. Lo que pasa es que desde marzo del año pasado la cosecha es tremenda, nunca hubo tal abundancia de frutos en los alcornocales

 

Estoy totalmente de acuerdo con vos.
Felices fiestas.

 

Que amargados...

La moneda tiene dos caras.
Compren un ángel y móntense en la mula de las talegas...
Con un lingote se completa...

* Oh, si...
Buena rima Chava...although alguien me hizo creer(falso pastor)
que los sonetos son de catorce silabas solamanete...
como ya se murió, no podría reclamarle

 

Las verdades abundan en tu poema, amigo, y, es maravilloso, un abrazo.

 

Muchas gracias por tus palabras, Gustavo.
Un abrazo y feliz navidad

 

Gracias, compañero.
Un abrazo de vuelta para ti