Tu semilla

Todos los perfiles te nombran. Hay un amanecer
y un jardín de flores con tu rostro. En los cristales
repica la lluvia como un verso que aúlla. Al fin verte
atravesar las acequias con los pájaros a tu lado,
sonriendo. Siempre tu cuerpo está junto a mí,
siempre un rizo tuyo se acuesta en mi labio como una línea
húmeda que sacia mi sed. A veces te crecen alas y tu vuelo
es un círculo donde la llama del deseo se columpia. A veces
te abrazo e imagino la nieve deshacerse en mis párpados
porque nace de ti la semilla de una razón hecha de carne
y de fuego. Y si te miro sé que es en mí donde siembras.

 

El amor se hace un suave canto en estas hermosas letras, el
placer de tener la compañía del amado siempre en nuestra
mente, en nuestro deseo, lo transmites maravillosamente en
tu enamorado poema, gracias por compartirlo. Recibe un
beso cariñoso que se apriete en tus mejillas.

 

Gracias, Anamer, por la lectura y la amabilidad de tu comentario. Un saludo cordial.