Vigilia

Vigilia

​

La realidad es la única verdad
que me hace existir (Orfelunio)
y debe imponerse sin violencia (León Tolstoi)
porque produce resultados (Buda);
que siendo más extraña
que la ficción (Shakespeare)
adelgaza pero no quiebra
y es como el aceite sobre el agua (Cervantes),
ya que la única verdad
es sólo la realidad (Aristóteles).

Los labios rosa de una bella aurora
que ofrecen besos al abrir los ojos,
me despertaron al calor señora
y entre las hojas de árbol vi reflejos.

Y miraba sus guiños antes de hora,
señal y frescor del alba que lejos,
dejaba prisas en la vida, azora,
sueños vivos de media y dedos dejos.

Más que de Atenas soy común de Esparta,
y tengo fe en esta suerte;
no tengo miedo a fulano
ni morir es que me importa;
llevo y obligo a la muerte,
y de hombre visto espartano.

Que vigilo aun dormido al can que muerde
a servirlo dispuesto, que en recelo,
me lloran entre el ojo anillo insano,
ojo que veo, y yo quisiera verde.​

 

Con la conciencia tranquila hay que dormir cuando toca.

 

Muchas gracias por tu visita Ángel, un abrazo

 

Un interesante mensaje entre lineas... Un gusto pasar

 

Acertaste, como muchas otras veces... Un abrazo

 

Bello poema, un poema muy interesante, magnífico, soberbio.

 

Muchas gracias por su comentario, señor Lemoine. Un abrazo