Xiv

Tómalo en tus brazos,
quítale el polvo que lleva encima,
pon en sus manos un frutsi
y verás, sonríe como todos.

Si juega como niño...

No te engañe su pielecita morena
llena de soledad,
¡es bueno a no dudar!,
dale un trompo, un libro y lo sabrás.

Si piensa como niño...

Salta detrás de él,
de charco en charco,
y ayúdalo a proteger de las ranas
sus barquitos de papel.

Si habla como niño...

Sólo pide que lo escuches
y le des una oportunidad.

Si mira como niño,
no lo dudes ¡es un niño!

 

Mucha Ternura en estas letras . Abrazo con lluvia de estrellas y caramelos...

 

Mujer azul:
Ya extrañaba tu mirada por estos mis versos. ¡Bienvenida!