¿Y qué?

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Éramos dos, los que dibujábamos filigrana a la natura.

Sin miramientos ni espantos sociales.

Solos los dos, convertíamos a las cabriolas

en vuelos de avanzadas galácticas de estrellas.

Nos amamos sin pensar en las diatribas,

las quejas de moral las dejamos para después.

Si rompemos el silencio de la noche.

¿Qué nos importa?

Son nuestras querencias el motivo de la vida.

Nuestras almohadas el confesionario.

Entonces, dejemos en el viento las ganas,

bebamos nuestra sabia de besos mutuos.

Donde el sabor penetre no la piel ni el vientre.

Que carcoma los huesos y las ideas.

Para que ambos sucumbamos a la agonía de los quejidos.


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Eran dos que miraban con buenos ojos su amor que se fue contaminando a los ojos ajenos pero perdurables entre su intimidad sin importarle a nadie.
Un gusto pasar por aqui.
Te dejo mi link para que igual me comentes:

http://www.mundopoesia.com/foros/poemas-generales/236431-callare-mi-desesperacion.html

 

Amigo y tocayo Rafael, que romànticas cada una de tus lìneas, que delicadeza y belleza la de tus versos. Es un honor y placer leer tu versar. Recibe mi más cálido saludo y estrellas.

 

Excelente obra, con imágenes hermosas!
En el título y el 8vo. verso te falta la tilde en "Qué".
Besos,
Chiqui.-