Crepúsculo

Devuélveme la luz de tu ternura,
tan negros tus ojos, tan negros y tan puros,
duendes traviesos de calles desoladas,
me empujan al deseo, a tu cintura.

Devuélveme el calor de tu sonrisa
y tu risa sonora inesperada.

Me acarician, me envuelven,
tus cabellos mineral oscuro,
me embriagan, me arrullan,
me acorralan.

Inexplicable el amor cuando se esfuma,
ni palabras certeras lo describen,
se agiganta la angustia en esa espera,
fantasmales manos merodean.

Y vendrán otros labios y otros besos,
pero no tendrán el sabor de tu mirada.

Tito Visentín

 

la primera mentira:
la luz que aclara el dìa...

y cuendoi llega la noche tenemos otro color,
otro aroma
otras estrellas,
pero, al mismo tiempo
extrañamos aquella primera mentira...

muy buen texto

saludos poeta

 

Acompasada y elegante armonía la que portan estos versos, un deleite leerlos.
Todas las estrellas y un beso para ti,:::hug:::

 

Muchas gracias por tu paso y tu comentario.
Un abrazo.
Tito

 

Muchas gracias amigo poeta.
Agradecido de tu paso.
Un abrazo.
Tito

 

muy bello escrito mi amigo, especialmente el tercer verso, donde sale el duende, un placer visitarlos, saludo y fuerte abrazo.

 

Muchas gracias Liz!
Agradecido de tu paso y de tus palabras.
Un cariño grande para vos!
Tito

 

Muchas gracias amigo poeta.
Un abrazo.
Tito

 

Agradecido de tus comentario y de tu paso por mis letras.
Un abrazo.
Tito