Espíritus aunados

Cuando se ama solo intercede el bien.
El amor reposado suspira hondamente;
arqueando la figura en penumbras,
los suspiros entornan la mirada
reflejando el matiz del pudor,
los párpados asienten cuando
de tanto amarte,
asciende lo abismal.
Guardo la memoria de aquel capítulo
que en el filo tus manos fue una
de esas partes: tus humedecidos cabellos
elaboraron ansiosos la fracción clandestina,
dibujando en el tiempo
audacias que fecundaron.
"Ámame cada vez porque cada vez
será irrepetible" dije para convencerme.
Quise creer. - que la heredad debla
ser el sello puro, fundiendo la
intimidad de los espíritus aunados...