Hambrientos

Encendidos pétalos amarillos,
otoño amargo lleva el viento.
Un sueño amargo, tardío, yerto,
agoniza punzante cual cuchillo.

Rodillas hincadas sobre el mundo
abriendo los guijarros sus carnes,
dulces manjares para los canes
amantes crueles de lo nauseabundo.

Ya la tarde encuentra sin premura
sus ojos vidriados de locura
feroz espejo del hombre que vi.

Y siento maldita el alma,fría,
su hambre es pena y furia mía,
comprendo por qué Dios murió así.

María de los Ángeles Durante

 

Bonitos versos que se internan en el alma buscando una salida a tanta estupidez humana. Reflexivos, profundos, sentidos. Aplausos y estrellas para tu cielo, poeta.

Big abrazos.

 

Grandioso logro en poesía
mágica en sus relatos,
recorro en silencio la travesía
de grandes cuadros y gratos.


Un verdadero honor leerte en esta magnifica composición, de trazo elegante y paso lleno de imágenes poéticas, despliegue de belleza en los versos que es un logro de tu genial pluma.