Juegos

Una vez mas cobijo la desesperanza con el infortunio,
La oscuridad con mi pena,
¡Qué fantasma tan terrible es el hueco de sueños y falsas realidades!,
¡Ahogan el infinito de ilusiones que alguna vez brotaron de mi mente!
Trágicos sucesos que se convierten en un drama épico,
Fustigando mis adentros,
Carcomiendo mí descanso,
Solapando el deshonor y la vergüenza,
De un fracaso... de una derrota,

Deseo someterme a los bajos instintos,
Y crear una nueva obra,
Que instigue a los contrarios y mitigue la desventura,

¡Vosotros sois los que calláis la injuria ¡
¡Que agiten los cielos y más!
Hacer irrisorio e inocuo el resbalar con el fango del camino,
Prometiendo y jurando
Con juegos maquiavélicos,
A los cuales el maestro de marionetas y el destino mueven las cuerdas,

Juega pues la importancia, la inquina en mi contra,
Y los intereses en desvelo pasajero,
¡Aturde el canto de vuestras almas!
¡Lleva el mensaje con pies veloces y ligeros¡
Más no con ello la alborada echara en mi cara mis propios versos,
¡Salve pues vuestros pensamientos¡
Encubra las acciones, pues bendita mano será,
Y no acabéis intrigando,

Mientras las sonatas mitiguen y desaparezcan el canto de las ideas,
Si a tal afrenta os atreven,
Decid al mundo, marchito y cruel suceso,
¡Dejadme aquí solo!
Solo entréguense a sus perversos juegos,

Juegos,
Los que yo mismo he preparado,
A los que sin pena me he incluido,

Vago es el sentimiento,
Pero por grandes llamas, inflamada es mi pasión,
Si vuestros ojos maldijeron el instante de ternura,
Solo con fines profanos que no detienen mi caída,
¡Pereced los incautos y vivid los astutos¡
¡Dejad a un lado lo pomposo, majestuoso o principesco¡
¡Los lujos y joyas!
Pues solo es burla vana y vacía,
Material y aborrecible,

No condenéis mi perjurio,
Si con sangre he lavado cada peldaño de mis pecados,
Crueles designios me aguardan,
¡Dejad la mentira en proceso y encontrad la cura a la herida malsana!

¡Que... cuál manzana del pecado,
Fruto prohibido, que exalta el caos!
Perdiendo redención,
Hiende mi cabeza tan terribles vísperas,

Más no con ellos la paz espero,
Sueños absurdos y realidades funestas,
Muerte violenta e iracunda que lleva mis progresos,

¡Tu cuerpo,
¡Éxtasis que embriaga, el toque que congela!
Pues a diario me pregunto...
¿Ahora que? ¿Quién soy?

Una aberrante calumnia arrojada cual excrescencia,
De manera infortunada y acusadora,
Dejaré a un lado los sonetos,

Eso
Si a hablar de verdades se trata,
Más de esta ágil pluma,
Solo lacerantes delirios e incongruencias leerás,

Sórdida mentira que llega a mis oídos,
Con tal vuelo majestuoso como ave reina,

Da por concluido mi mensaje,
Y quiera bien dejadme un saludo
A modo de despedida,
A modo de epitafio,


Dejad a un lado enhiestos deberes,
Rígidos cuál firme voluntad,
E irrumpir de manera concreta los corazones humanos,
¿Qué hacer? ...Tanto por decir y pocas palabras,
Enlodo mis recuerdos y entierro mis sueños
Y... nunca más me verás
Nada de lo que decís afecta la muina y la depresión,
Es esta la que me embarga, y así mi sentir,
¡Oh pérfida nostalgia!
¡Arrogante melancolía!

Y es en esta tierra de sufrimiento eterno y olvido,
Que llegará mi juicio,
Lamentando mi soledad,
Mi tristeza,
No por ello calmes mis deseos,

Silencia mis palabras para siempre,
Pero no te arrodilles al destino,
No acates el destino ni lo divino,

¡Reclama mi trono!
Pero no mis sueños,
No, mis sentimientos...
No, mis esperanzas,

Reclama mi trono,
Pero no mis ideales,
Pues es lo único ¡Mío!

El único tesoro que me llevaré,
En donde estas tu,
Fantasma ilustre pura y bienaventurada,
Amable y amada,

Tú y mis demás recuerdos
Mi único y real tesoro

Lord Vélfragor

 

Me permito decirte mi lord que escribes con fuerza y se nota tu alma de músico en tu letra. Un abrazito y bienvenito a este maravilloso portal.