Mortal-.

Es éste el imperio de la muerte.

Mortal, piensa como lo que eres,

sino, alas de cera como Prometeo,

han de salirte, que a tus anhelos

no sirvan. A morir venimos, y

solamente a ello; pocos dejan huella,

dejando sus tripas, colgadas al borde

del desfiladero. En tu senda, no pidas

lujos ni oropeles, columnas jónicas o dóricas,

que tus altares decoren;
exige humildad siempre, sabiendo que nada

eres.



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El que nace se muere y punto.
Un abrazo, BEN.

 

Sí, estimado Good, pero entremedias? sólo el desenlace? En ocasiones, sí, tristemente, un abrazo y gracias por pasarte!!

 

Si querido amigo Ben, y si yendo a parar a la muerte se hace tanto mal, que no sería sin esa prueba final? la humildad es una gran lección, no somos nada sin la bondad. Un abrazo, siempre un placer leer tus poemas.

 

Gracias por tan severa afirmación, un abrazo tribu!!