Rebuscado

Aún sobrevivo en una realidad,
y en la mía no existo, y me contrista.
Miro con precaución, fuerzo la vista.
Vizco, vuelvo a la vil banalidad.

Y ella me pide más vitalidad,
abusa de mi mente, y la conquista.
Vencido, cualquier cosa me despista,
parte mi pensamiento a la mitad.

Luego, oculto y silencio mi dilema,
en lo que dignifica a la locura,
y agiganta el desgaste y el problema.

Es un bucle que ondea con soltura
en mi cerebro, y sigue por sistema,
hasta que lo detenga mi amargura.