Un deseo

Enciende el sol

tu sonrisa,

brillan las nubes

en tus pupilas,

leo tu belleza

madrugadora

y escribo un deseo

en la mañana:

amor

no

te vayas.




​

 

Y vendrán, de nuevo, a aplaudirte.
Son incansables.
Así, año tras año y siglo tras siglo.
¿ Somos autómatas ? La crítica no ha lugar, porque Paco es un valiente.
Y es mañico.


Y nos representa a todos. Qué bellos homenajes plasma con su certera pluma.


Versos prolíficos, en una caminata esforzada, que pugna con otros muchos maestros ascendidos, para rebasar las cumbres de la idoneidad y la templanza. Llegando al frenesí del Olimpo de los dioses, los cuáles se van ennegreciendo, ante la llegada del nuevo caudillo, que trae las leyes permanentes, que asegurarán la continuidad de la Humanidad, sobre la faz de la Tierra, etc, etc, etc.


¡ Bravo ! ¿ No ? Es lo que andas buscando, que te respondamos.

 

El deseo y anhelo que todos los seres enamorados tenemos, cultivar por siempre la mirada del ser amado en el amanecer. ¡Simplemente magistral! Un verdadero placer disfrutar de su exquisita poesía, Paco, reciba la más cordial felicitación y saludo.

 

Cuando se está enamorado el tiempo vuela y uno quisiera quedarse ahí, junto al ser amado por siempre, romántico escrito un placer leerle, saludos!

 

Gracias amigo Nommo. Un abrazo. Paco.

 

Por todos los dioses Paquito aquí estoy como siempre derretida como miel y mantequilla ante el pan de tus versos, encantadores y románticos versos, dulce entrega que hace brillar mi mirada y mis latidos hacen mas rapidito su canto.
Un abrazo y descuida no me iré

 

Gracias amigo Daniel por tu bello comentario. Abrazote vuela. Paco.

 

Gracias amiga Brisa por tus bellas palabras. Abrazote maño para ti. Paco.

 

Hermoso, simplemente hermoso. Un placer pasar y disfrutar de tu poesia ,un abrazo fraterno saludos poeta .

 

Gracias amigo jalvarez por tus bellas palabras. Un abrazo. Paco.

 

Bueno estaba yo este día que escribí esto algo tierno, mi mamá tuvo la culpa pues me reí con ella y me contó cosas de cuando eran novios mi papá y ella, así nació este pequeño y dulce poema. Gracias de heladico de vainilla y un besico con más ternura que un oso panda para mi Mireya, mi mariposa de la selva: MMUUAAKKSS. Paco.