Voluntad

Para que olvide el nombre de ciertas cosas
Debo crecer en el azogue puramente,
Tal vez marcharme en la elipsis nocturna de las voces,
No decir adiós, ni mirar atrás a las hojas
Vencidas por el transitar de la luna.

El viento esta a favor, siempre lo esta,
Para aquellos que buscan una realidad
En este orbe de incesantes quimeras,
No será fácil emerger, cuando se es grande,
Punza nacer desde afuera.
Seré el de pan, deseo y letras.

El mundo se inventara en la palma de mi destreza,
Lo trazare al viento que va de mano en mano,
Que se transforma de voz en forjado eco
Y cuando sea grácil, lo dispersare en los hilos de la mente,
El universo, el hombre y el tiempo se encargarán del resto.

Palabras nunca antes expuestas al sol,
Las paginas del destino doblegadas
Al sencillo movimiento de las cosas que
Brotan al ritmo agitado de los seres.

Para que olvide el nombre de ciertas cosas,
Treparé hasta la cabeza del planeta si es necesario,
Desde lo alto arrojare la savia de mi médula
Que se posará en las almas merecedoras de mi alma.
Será tu hijo y el linaje de sus hijos
Quienes saborearan la sangre de mi espíritu,
Me llevarán al bosque a oler las flores,
Evocarán mi palabra frente al danzante fuego,
Me ahogarán en las uvas seductoras
Para libertarme entre dulces encuentros.

Para que olvide el nombre de ciertas cosas,
Olvidare mi nombre en el lóbrego silencio de la eterna noche.
Me perderé en el apagado musgo
Que rompe los caminos del hombre... naceré de nuevo.
Para que olvide el nombre de ciertas cosas...