Vuelos

Vuelos


Jugar quisiera siempre en las fontanas
alegre con los trinos de alboradas
que surcan en sus vuelos cielos de hadas
y gozan el repique de campanas.

Abrir contenta todas mis ventanas
y ver al sol pintar copas doradas;
las aves adivino enamoradas
vestidas con matices de gencianas.

El bosque resplandece en sus colores,
atrae mariposas que embelesan
y así en cataratas sus valores

se encienden en sus frondas que se besan
y son de la foresta los amores
que siempre con ternura nos profesan.

 

Es el Beatus ille que yo persigo en cada rincón de todos mis anhelos. Feliz tú que te arropa ese bosque hospitalario.
Gracias por ofrecernos el susurro de sus fuentes.

Mi abrazo.

 

¡Muchas gracias a ti por tu hermoso comentario
que alegra el sendero de mis versos!
Busca el trinar de un zorzal, el silencio que da paz,
el aroma de las flores, en un altar de frondas con
sus mil colores.

Un abrazo cordial amigo Vicente, desde mi bosque.​

 

Querida Matilde, bello poema impregnado de aromas de tu bosque. Me ha encantado llevarme ese sabor de bella poesía.- Un abrazo.-