Existen poemas silenciosos guardados y a veces escondidos como gotas de agua poema tras poema para que alguien un día los descubra y los...
Mi poesía es el alfabeto de tu piel, porque a través de ella, he aprendido a tocarte y a robarte suspiros, deteniendo el tiempo y sacralizando el...
Hace tiempo te amaba y te poseía. Ahora solo te escribo y te hago poesía. — Carlos Alberto Vargas S. [IMG]
“¿Qué es poesía? ¿Y tú me lo preguntas? POESÍA ERES TÚ”. Extraordinario y prominente, Bécquer. Como se anticipó a su tiempo. Lo que no logro...
Te soñé, como quien sueña y se imagina una conversación perfecta (aquella que nunca existió), desperté y me di cuenta que no solo era un sueño,...
Hoja en blanco escrita con tinta del tiempo, inspirada en la belleza de tu alma, versificada con la imagen de tu cuerpo, estampada en la...
[IMG] Pretender no pensarte para no extrañarte es engañarme, es permitirle a la soledad apropiarme. Por eso cuando te pienso no miento...
Destapo las sabanas y ahí está ella como la poesía de Pizarnik lista para acabar con su presa, desnuda y descobija, sin una gota de sangre...
Inspiración por ti, guardo en mi alma, mente y corazón. Necesidad de ti, siento por cada instante que te pienso. Nostalgia extendida, almacena...
Mi cuerpo no está constituido de células, sino de palabras. Mi sangre no está compuesta de plasma, solo de tinta. No abrazo con mis brazos,...
Estar sin ti y no poder escribir, porque mi poema eres Tu. — Carlos Alberto Vargas S. [IMG]
Te amo tanto, que hasta he aprendido a tocarte en mis sueños, haciéndote feliz con el solo hecho de pensarte. — Carlos Alberto Vargas S. . .[IMG]
Los poetas enamoran con la belleza de sus palabras. Yo, un simple soñador, enamoro con la belleza de mi alma. — Carlos Alberto Vargas S. . [IMG]
Por sentir el perfume de tu rosa, soy capaz de vivir en un mundo de espinas. — Carlos Alberto Vargas S. [IMG]
Me gaste hasta la última lágrima esperando su regreso. Y hoy muero de sed por sus besos. — Carlos Alberto Vargas S. [IMG]
Suspirando recuerdos de tiempos donde nada lo podía separar de su amor, cubriendo todo el lugar con la sombra de su nostalgia. El cielo está...
Y morí entregando mi corazón en un poema que nunca le recité. — Carlos Alberto Vargas S. [IMG]