15 aforismos y 2 poemas de viernes por la noche

1
Si admito que se puede morir de amor, he de admitir que se puede vivir del odio.


2
Hay algo que no se puede negar en cuanto a inteligencia se refiere, que hay quienes son menos inteligentes y hay otros que a fuerza de intentarlo lo son menos aún.


3
Encontre una razón más para beber, y es que no he encontrado aún una razón para dejarlo de hacer.


4
Nunca me ha resultado facil hacer las cosas a mi manera, mucho menos hacerlas a la manera de alguien más.


5
Yo no podria vivir sólo con mi águila y mi serpiente, terminarían deborandose y dejandome realmente solo.


6
Perdí mi látigo, ¿Ahora con que haré bailar a la mujer?


7
La única gran verdad sobre la vida es que todo mundo busca su verdad y pretende que ésta sea una verdad para todos.


8
Cuando crees que lo has superado todo llega siempre una fiera mayor con intensiones menos sanas que la de antes y con menos dientes. Esto último significa que tardará más en deborarte.


9
Si existe un verdadero retorno de lo mismo éste se da en los fenómenos del enamoramiento. Siempre te enamoras de lo mismo, actuas dela misma forma y siempre tienes el mismo final.


10
¡Un vaso de brandy! ¡Mi estética corporal por un vaso de brandy!


11
Aquella noche me olvide de todo, de mí, de mi dolor y tristeza, del trabajo y el estudio, de que soy hombre y de que me gustan las mujeres. Desperte y ahora me arrepiento de mi últimos dos olvidos.


12
Me gusta todo lo poco en ti, pues todo lo que yo veo es poco, detalles, sólo detalles, eso es todo.


13
Si la vida fuera para ser feliz eso reforsaría áun más la idea de que somos seres miserables e infelices, pues deseamos la felicidad, y como han sabido ver los filósofos, sólo deseamos de lo que caresemos


14
Siempre resulta facil hacer lo que se debe hacer pues eslo que se debe hacer. Lo dificil es darse cuenta de que es lo que se debe hacer.


15
Cuando la vi lo supe, era una mujer. Lo supe por su postura, parecia estar al asecho.




I
Cautivado y tonto, como todo hombre, así quede yo la noche en que por fin, libre de sueños eternos, me vi dichoso en brazos de un nuevo sueño, bello, auténtico y más cercano que los demás.


Pero igual que el sol que muere y nace cada mañana, así mi corazón un tanto muerto, un tanto roto y un tanto enfermo se deshace una vez más como un vaso de papel con lagrimas secas.


Espero que mis pensamientos fatidicos y funestos sean sólo eso, meras supociciones de esta agitada imaginación que a ratos, cuando el frío es crudo y la tarde limpia, le gusta pensar en tu favor.


Pero fuerte y sabio en cuestiones de voluntad y valor, no importa que pase, si has de decir “si” a los lamentos y gemidos de un alma desesperada y necia que alguna vez te causo temor.


No saldra de mí ni un suspiro, ni un solo quejido de dolor, ni un respiro del alma que clama por que mi serpiente le dé la palabra y la deje hablar diciendo, “soy yo, quien siente esto oculto para ti”.


Quizá pida demasiado, quizá he usado las ismas palabras una y otra vez, pues da la casualidad que siempre soy el mismo, que siempe siento lo mismo, que nunca aprenderé. Quizá...


Pero si a caso pudiera ser que la luna dejó caer su luz sobre aquella araña en la cima de la montaña, entonces guardaría la esperanza en mí como el tesoro que se le ha negado al hambriento.


Pero ahora, mientras la noche pálida y fría deja caer sólo el viento gélido en el balcón, no queda más que soñar una vez más, y ver como se repite la historia y reencarna mi alma.


Una vez más la serpiente muerde su propia cola en una cruel espiral eterna sin final que conden a mi corazón a morir y vivir, hasta que por fin acepte, que si ha nacdo, ha nacido para sufrir.




II
Y cuando te miro, no se que veo. Si veo tus ojos o los mios reflejados en ellos.
Si es aquella sonrisa que reanima mis animos o tu dicha y jovialidad en momentos marchitas.


Y con tierna rabia recorro con la mirada la linea curvada que es tu boca
Y con pena miro tus caderas, tus piernas y pienso, “que poca cosa soy yo”


Y tu también me miras, y nos quedamos callados como si supieramos lo que pensamos,
nos ruborisamos y seguimos hablando de lo importante de la importancia.


Y sé yo lo que piensas, piensas en cualquier cosa menos en mí; perdido en el vacio de quellas palabras puedo sentir como soy uno y menos a la izquierda del tiempo y al sur de de tu universo.


Y es dificil vivir así cerca de ti, pero a fuerza de volntad he aprendido a pasarla peor, así que ahora sin importar que nos miremos horas sin nada que decir, y al final, hayamos hablado de más.


Porque una vez más te miro, y me gusta lo que veo y todo aquello que no veo, que son aquellas cosas que me hacen pensar a ti cuando camino y cuando sueño y al Diablo pido por mi destierro.


Y te doy gracias por haberme puesto en mi lugar y haberme enseñado que las cosas pasan, espero que así pases tú el día que ya no te pueda mirar, o el díaque al mirarte sienta que ya no puedo más.

 

Compadre,
hoy que Cristo te ama y el mundo es amor,
para redención de tus siervos mejor castigo hubiera sido 2 aforismos y 38 poemas de este estilo.

elPrior

 

Excelente aforismos, en cuanto al número 6

¿Has perdido tu látigo? ¿tienes antojo de un baile? ¿para qué quieres un látigo si hoy en día es fácil conseguir un arma de fuego?

Un gusto leer tu texto, muy loco alemán n_n

Saludos