20.85.- Decepción desconocida.

Te escribí sin conocer tu respuesta,
en medio del otoño acariciando
la soledad que venía adulando
en silencio, y la mirada funesta.

Esa era yo, con la contrapropuesta
del destino, perdida, murmurando
las palabras que llevo naufragando
en mi mundo senil que aún me arresta.

Que todavía caen hojas mustias
donde se escribe cada decepción
posando todas mis frías angustias;

de un amor inmensurable, a excepción
de aquellas tardes frágiles y amustias
que añoraba mi inane corazón.





Marián González*
A un desconocido.​

 

Gracias Salva, aunque no comprendo tu referencia, te agradezco te tomes el tiempo para leerme


saludos cordiales

 

Los tendones se vuelven flácidos, los músculos débiles, la piel arrugada... pero el corazón late con la intensidad de un amorío adolescente... me gusta leerte.

Saludos cordiales.

 

Sabes? aveces el coincidir nunca es suficiente, nuestros esfuerzos se pierden en la fragilidad de los silencios.
Tú eres esa pulsación que cual espina despierta los sentidos y presiona la herida y lo haces mirar hermoso en tus letras
Esa es tu magia querida y dulce poeta.
Saludos y siempre mi cariño y respeto.
Bello inicio de semana para ti.

 

Aplausos, aplausos, aplausos
un excelente soneto a los que nos tiene acostumbrados
me encanta leer sus versos, siento que me identifico
besos de azules en la distancia estimada poeta,

 

Hermoso versar en soneto, maravilloso.