200 gramos de misericordia

200 gramos de misericordia
que tratan
de aliviar el daño
de la furia contenida,
los golpes no dados
a la pared fria
y blanca
como una puta vida
de sueños no resueltos
y promesas no cumplidas.



200 gramos que vanos
intentan anestesiar el veneno
y el decisivo hecho
de tu ausencia
o simplemente
solo es que no estás y esto
es lo que mata,
la sangre, la suerte
que fluye,
se rompe
y se para.



200 gramos de misericordia
para aliviar el dolor
y quemar la indecencia
de esta perversa forma de amar,
de recordarte,
de quererte
matar.






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Buen poema, la rabia aflora en el cierre y la poesía la torna en un disparo que, con ecos versados, trasciende.
Mis estrellas y un abrazo para ti,:::gafas1:::

 

Sí, a veces al furia es tan grande, la bronca contenida, la impotencia de no poder realizar un sueño, un anhelo o simplemente un deseo, que rompe las barreras de lo real y crea arte, como este poema.
Lo siento en el alma, me ha llegado a conmover profundamente.
Un placer leerte.
Te mando un abrazo.