8 de octubre de 2018 (la transición)

Escribo,
Porque la poesía me ha dado el derecho.
Me ha tocado y yo la invoco.
Escribo para que venga a protegerme.

Para sentir un poco mis problemas menos,
Para sentir, al final de cuentas.
Poesía respóndeme desde dónde te encuentres,
Te necesito y grito entre líneas.

La vida es fatídica para mí,
No aguanto la mortalidad,
Y la nostalgia de una vida que nunca ha sido,
De una historia que aún no sé ha escrito.

Escribo para estar en ella Poesía,
Dime dónde buscarte?
En qué mar debo sumergirme,
Te necesito como al mismo aire.

Poesía das sentido y vida a mí ser,
Por eso sigo,
De las razones principales por las que sigo.
Poesía toma mi mano que se desliza…

Al abismo,
A nunca más,
sí,
A ti.

(…)

Esperé un amor por años,
Un cariño sincero por mí que no le pareciera feo.
Alguien que me aceptara con mis defectos y virtudes,
Por años lo esperé y nunca llegó.

Me cansa decir que el amor no es para mí,
Es que tal vez es tan especial e ordinario que yo no le merezco.
Y muchos creían en mí
Y depositaban sus creencias sobre lo que sería mi vida en un futuro,
Y mi futuro, oh futuro. Tal vez no lo tenga nunca.

No fui hecho,
Ni para esta vida,
No sé porqué me arriesgué,
Este mundo es el infierno y aún no sé han dado cuenta.

El infierno.
Un lugar romántico decía Wilde,
Santos y pecadores juntos,
Siempre juntos. Juntos haciéndonos daño cono escribía Schopenhauer como puercoespines.

Desde siempre haciéndome daño,
Y hasta no hace unos años ,
Creí que estaba vivo.
Tal vez sólo en mis primeros años estuve vivo. Después muerte, muerte, muerte.

No es un joven el que escribe,
Es la poesía que selecciono a un cadáver no hace poco,
Su mano derrocha pasión y olor a muerto.
La cabeza ideas.

Muerto, muertísimo.

(…)

Olvidado por todos,
Desde sus abuelos hasta sus hermanos,
Desde Dios hasta el menor de los seres,
Olvido debiese haber sido mi destino y no mis sentimientos.

Dios de dioses,
Poeta de poetas,
Al que no sé le permitió ver la grandeza,
Pero si las proezas de su coraje.

Qué vida tan injusta es esta que el justo es el menos,
Y el malo es el más.
No hay providencia,
Sólo indulgencias.

La vida ni de color de rosa me sabe,
Nada me salva de esta amargura en la boca,
Sólo quiero que la noche se acabe y con ella mi vida.
He llegado a conocer lo verdadero oscuro de la noche.

Un joven se lamenta y su dolor llega al universo,
Es visto e ignorado por otros seres,
Pues su misión de vivir y morir no ha terminado,
No hay esperanza. Vida que puta eres.

Nada viene del cielo,
Sólo meteoritos y maldiciones,
Por eso no confío en nadie,
Pues solo es para destrucción.

El día que mi vida acabé,
Podrán decir lo que quieran sobre mí,
Sólo una cosa no les permitirá la existencia,
Y es que digan que fui un cobarde.

 

Gracias @Maramin. Lo tendré en cuenta.