A la hiedra

Incesante la hiedra tan maligna
Por los muros y los techos trepa
Abarcando todo sin que quepa
Una flor, de ella mas digna

Por los muros tan rocosos quiere
Expandir su veneno y mortandad
Y deja todo repleto de maldad
Después de que avanzando hiere

Así la maldita hierba despiadada
Va consumiendo plantas en redor
Mientras que inspira cruel terror
A todas las flores en bandada

Y planta a planta y flor a flor
Va siendo la victima deseada
De aquella, cuya alma no saciada
Solo inspira tristezas y dolor

Y así el jardín que tan radiante
Orgullosos exhibía muchas flores
Fue inundada de llanto y dolores
Por aquella malvada caminante

Así, las flores reunidas con tristeza
Una solución se propusieron aportar
Y solo una lograron hallar:
Y al jardinero llamaron con presteza

Una vez que el anciano jardinero
Hasta el jardín pudo llegar
Una a una, se pusieron a quejar
Ante aquel infatigable jornalero

Le dijeron que imposible era estar
En ese jardín, y se quejaron
Ante el, y sentenciaron:
¡A la Hiedra la tienes que arrancar!

Sin embargo el hombre a pensar
Se dispuso, y cuando hubo terminado
Dijo: haré lo que me han solicitado,
Pero antes la tengo que podar
Sin embargo cuando la hubo ya podado
Continuó avanzando y persistente
Prosiguió asesinando tristemente
A aquellas que la habían acusado

Entonces las flores en reunión
Se juntaron las pocas que quedaban
Y acurrucándose, mucho lloraban
Pues veían que no había solución

Así pasaron muchas horas
Antes que una se atreviera a salir
Y cuando entró pudo decir:
¡¡Salid, Salid, Ved cuantas mejoras!!

Entonces una a una cada flor
Fue saliendo triste y confundida
Y admiraronse al ver que nueva vida
El jardín tenía, y veíase mejor

Entonces cada una vacilaba
La causa de aquella mejoría
Pues aquella desbordante alegría
A todas las flores inundaba

Al fin cuando todas hubieron ya salido
Y cuando no encontraban explicación
Se oyó una voz que con emoción
Decía: -No os preocupéis, yo he sido.-

Voltearon a una cada flor
Al oír ese aliento tan sereno
Y al voltear vieron al anciano jardinero
Que les hablaba con inmenso amor

-No os espantéis querida flores
He sido yo el que ha actuado
Lo que hace tiempo me habéis solicitado
Hablando hacia mí de sus dolores

Entonces yo os respondí con esperanza
de controlar la hiedra que tanto mató
pero aunque por ella pedí , no cambió
y aquí, hoy, yo os muestro mi venganza

No olviden que aun siendo veterano
Que ama y cuida las flores tantas
También aprendí que algunas plantas
Hay que saber arrancarlas con la mano

Por lo tanto, amigas queridas
Del jardín que es vuestro disfrutad
Y olvidando el pasado y las heridas
En este pedazo de tierra, Recomenzad

¡¡Oh querida bandada de flores, se que vos
Habéis padecido mucho y has triunfado
Así, que ahora disfrutad, lo que has soñado
Y ved que merecida, Pasa la Bondad de Dios!!

 

Perfección técnica y originalidad se alían en este poema que destaca por su sentimiento y su métrica original, que atrapa desde el principio. Luis

 

Gracias, soy un poco nuevo en ésto, pero me gusta escribir de cuando en cuando unas letras
Saludos