A la poesía (mi alma teñida de rosa)

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Estoy aparentando estar bien,
y lo que terror me da es que nada lo está,
hace frío acá dentro, muy dentro…
Hasta el fondo…
frase que me recuerda a muchas noches y personas…

Cansado de mi locura, de mi mente,
en este jodido mundo me hallo fumando en la azotea de mi casa,
bajo la luz de una puta luna que me es infiel con muchos y muchas…
con un ridículo cigarillo detenido en una mano temblorosa y enferma.

Dicen que soy joven pero para mí eso no significa una mierda,
cada vez me siento más desechable, eso es todo.
Los mismos que dicen “vive la vida a tu manera, no como te ordenen”,
son los que el día de mañana te escupen en la cara por las decisiones tomadas…

Nada más que hipocresía, todo lo que veo es eso,
y se equivocan cuando dicen “nada nuevo bajo el sol”,
yo soy lo nuevo de la historia que yace bajo el sol,
son demasiado ciegos y torpes para verlo, sin embargo…

¡Viva la poesía por los siglos de los siglos…!
es la casa que habitan esencias verdaderas,
y tengo el placer de escribiros desde acá,
con un chocolate caliente y un brillante y efusivo recuerdo…

Ya entiendo porqué os estoy escribiendo,
y es que a veces se me olvida que aquí estoy viviendo,
mi alma está peleada con el mundo, es libre, loca, divina…
cuando se me llega a olvidar es un dolor como de muela…
me hace maldecir y decir disparates,
por supuesto nunca contra la poesía,
la única que me entiende y ha salvado…

Casa colorida, calurosa, amena es la poesía,
¡miren cómo ese dolor insoportable de la primera línea se ha disipado!
Eso hace, hace la poesía eso,
para el alma es anestesia.