A madre. Soneto.

Mi vieja prendió la luz de mi frente
amándome la piel con su dulzura,
le dio su corazón a mi escritura
haciéndola materia convincente.

Mi vieja plantó en mi ser su simiente
cuidándola al calor de su estatura,
simiente, carne tierna, piel oscura,
selecta, transgresora, inconsistente.

De madre conocí mi fortaleza,
la sal que el lagrimal suave desprende,
la risa que aligera la cabeza.

De madre casi nada me sorprende,
incluso sin estar hoy, su tibieza
me arropa si la vida no me entiende.

 

Conmovedor...
Vaya, me ha dejado sin palabras, envuelta en este sentimiento tan dulce, de tanta admiración
y sobre todo amor hacia la mujer más valiosa que tenemos en la vida.
Muchas felicidades por lograr que tus versos nos hagan vibrar, gracias por compartirlos.

 

Pathétique, el placer es enteramente mío. Gracias por dejaros llevar por mis letrillas. Gracias por ayudarme a compartirlas. Saludos.

 

Precioso amigo...lleno de Amor y agradecimiento...su presencia que sigue iluminando...se ha quedado...un gusto leerte...
Te abrazo con todo mi cariño...

 

QUE HERMOSO, un gran homenaje muy merecido a ellas las madres, pleno de amor y ternura y fe, por como lo dices en el final que me conmueve pero es asi, saludos, estrellas y reputacion.

 

ya no pude darte la reputacion, no lo admite el sistema pero se que en otro poema la recuperas.

 

Muchas gracias Mamen. Saludos.

 

Sol, agradecido. Saludos afectuosos.

 

Muchas gracias por tus palabras y estrellas, Sol. Saludos.

 

Muchas gracias Darkness por todo. Te abrazo igual.