A un poeta de buenos aires

A UN POETA DE BUENOS AIRES

​

Cómo haberte encontrado. Viajero a contracielo
visitador nocturno de cantinas
bebedor de cien pájaros al cielo
que en un vaso de vino se fulminan.

Loco sofocador de la locura
en un planeta gris te habías sentado
a dirigir un tránsito de altura
y a detener la órbita de un astro.

Nunca te tuvo Buenos Aires, nunca
fracasaste en un beso de granito...
sólo dejaste una mirada trunca
y algún papel lejanamente escrito

Y sin embargo a pie la deshacías
en los pedazos grises del asfalto,
caminaste tal vez para destruirla
la quisiste romper entre tus pasos.

Trasnochador de barba y catalejo
el río fué pintando tu retrato,
mas tu perfil de rasgos desparejos
estaba en un café pasando el rato.

Sobrabas la ciudad. Eras deshecho,
gato gris que revuelve la basura
buscando una señal, un solo dejo
que valiera una racha de ternura.

Pero no lo encontraste. Misionero
con tu verde sotana misteriosa
fuiste a evangelizar el desconsuelo
con una sola cruz: la de la rosa.

Dónde estás gaucho gris. Te busco a solas
en esa edad caliente de cigarras
siempre te iré llorando en las corolas
y más allá de todas las guitarras.
​

 

Hermoso poema. Descripción de una genial Buenos Aires. Tus aires de ciudad, se suscriben al perfil exacto de un porteño. El café, la guitarra y la rosa, todo está incluido hasta el atisbo alemental de la nostalgia. Infinitamente bello. Ludmila