A veces

Ya se que soy patético
no necesito que me lo diga
una perra malnacida, traidora como vos.
Pero a veces te recuerdo, a vos y aquellos días
y el mundo se me acaba
por más que te putee ya no puedo escapar.
Entonces me emborracho y vuelvo a las andadas
ando por los callejones buscando a quien pelear
y acabo como siempre, la jeta ensangrentada
los labios destrozados y un nudo en la garganta
que apenas me permite decir tu puto nombre.