Acrecentó mi fe

Se acrecentó mi fe

Tu omnipotencia se dio por las plegarias
con que orando te pedimos Dios divino.
dignos de tu misericordia nos hiciste,
cuando la sanación de mi hija suplicamos.
Nunca he dudado Señor de tu existencia
ni de tu portentosa mano diestra,
si en muchas ocasiones tu presencia
la he sentido aplacando mis pesares.
Precisamente en estos avatares;
cuando los médicos se daban por vencidos;
escuchaste mi súplica en sollozos.
Millares de oraciones explotaron,
de labios de mayores y de niños,
en aires de oración por tu clemencia,
hasta que nos tuviste compasión.
Gracias te doy Señor, con esta prueba,
acrecentó mi fe.
Ahora entiendo más,
eres
nuestro salvador.

Ramiro Ponce P.​

Ramiro Ponce P.

 

Bella plegaria mi amigo, un latido dedicado a nuestro Dios, Saludos.
Franc.

 

Una devoción tan intensa que conmueve ! Bellísimo poema, amigo !! Un abrazo

 

Eclesiastés 7:14
14 En el día del bien goza del bien; y en el día de la adversidad considera. Dios hizo tanto lo uno como lo otro, a fin de que el hombre nada halle después de él.

Hermosas lineas dedicadas al Unico en quein se puede confiar y pedir, por que es el mismo ayer hoy y siempre...
un abrazo grande amigo , hermosas pinceladas... ATT: Anonymo

 

Gracias frankaussill, gracias de corazón.
Fuerte abrazo.

 

Gracias, muchas gracias Anónymo por esta hermosa huella que dejas en mi espacio. Fortísimo abrazo, con respeto y gratitud.

 

Muchas gracias Miguel, gracias de corazón.

 

Muy hermoso poema donde pides a Dios y le agradeces con una buena plegaria la curación de tu hija. Hay que tener fe en Dios que es la fuerza del mundo. Un abrazo amigo.

 

Hermosa oración y felicidades por la sanación de tu hija

Saludos

 

Gracias Luis, muchas gracias por vuestra generosidad.
Fuerte abrazo amigo.

 

Gracias Paloma, gracias por vuestra generosidad.
Fuerte abrazo, con cariño y gratitud.

 

Gracias Damita, gracias con el corazón.
Abrazos, con cariño y gratitud.

 

Ayyy Ramiro, qué plegaria más ferviente a nuestro Dios... cuando nos sentimos en el abismo, su mano la acerca hacia nosotros y nos aparta de él. Me ha encantado leerte, siempre me encanta. Besazos llenos de admiración y de cariño.

 

Amén por los dos milagros, el de la salud restaurada y el de la fe en crecimiento. Me alegra que todo haya ido bien. Un saludo.

 

Gracias mi querida Lomita, no sabes la profundidad que tu huella deja
en mi espacio, gracias con el corazón. De besos, te los envío un montón.

 

Gracias querida Luz, gracias con el corazón.
Fuerte abrazo, con cariño y gratitud.