Adoro...

adoro
tu rostro de héroe
ausente mirada como relámpago azul
de tan negro -
silencio del sol en mil inviernos
campo de luz
en tu frente...
oscuridad ardiente que ansío -
tú eres un fuego frío
arma letal
para mi corazón

adoro
tu amor indiferente
silenciosa tempestad
donde no hay vida sin la muerte...

adoro
tu alma y pensamiento
y tu cuerpo del que tengo hambre
ahora
y siempre...


****


adoro
en las noches amanecer contigo
como luna blanda -
y dócilmente
buscar palabras apropiadas
para
enaltecerte...

adoro
cuando sonríes oscuramente
y caen mis ojos por el río...
besando el camino sobre la alfombra durmiente -
de silencios que gritan
la pasión de mis poesías...

adoro
el otoño en lágrimas
que me envuelve en un dolor alegre
de tus
azules espinas...

adoro
bajo tus alas estar de rodillas -
en lagos profundos de mi ser desprendida
ofrecerte mi vida...
ser canto sin voz y vela prendida
de tus manos distantes que imagino...
amado señor...


****


adoro
en la danza del universo
ser polvo de la tierra
trono y pedestal
de tus navajas gloriosas
como piedra occidental
cortando las venas de mi soledad...
apaciguando
el mar tormentoso
de mis deseos de la eterna servidumbre
al dueño de mi amor, como el viento...
arrancando
de mi existencia el pudor
la quintaesencia
de lo que soy...

devoción sin fin y sin medida...
sólo para ti, mi señor...






[17/10/2014]


​

 

El poema es realmente poderoso en su vigor poético, pero esta parte realmente me ha encantado de sobremanera. Preciosos y apasionados versos. Ha sido un placer enorme poder leerlos. Un grana abrazo, poetisa.


Hernán

 

Gracias. Saludos.