Afortunado en el amor.

Afortunado en el amor,

ya conocemos el resto,

nada nuevo bajo el sol,

en esta selva de concreto.


Y aunque el día de hoy pienses,

tener una buena mano,

juega siempre a lo prudente,

y retírate cuando es sano.


Dicen en esta vida,

todo no puedes tener,

mas yo sin dudar elegiría,

tener conquistas en mi haber.


Nunca pierdas la cabeza,

por ambición al dinero,

pero si una bella se interesa,

apuéstale el cuerpo entero.


Afortunado como amante,

él no tiene ninguna queja,

una madura abundante,

y asegurada buena herencia.


Un ingenuo entre amigos y copas,

en esta mano no puedo perder,

mientras otro le quita la ropa,

a un monumento de mujer.


Pago por ver,

y va todo mi resto,

mientras prueba la miel,

aquel amante discreto.


Su flor imperial no basto,

contra el póker de reinas,

afortunado en el amor,

nunca estará en quiebra.


Un ganador nato es un hecho,

no mezcla negocios con pasión,

el buen romance es su dialecto

y va deshojando de flor en flor.

 

También puedes estar solo, y contemplativo. Eso hacen los monjes y las monjas. Depende de tu vocación.