Al borde del ocaso

Porque despierto cada día
temiendo que no amanezca
porque se que me queda poco tiempo
para cumplir mis metas

Porque entiendo que el horizonte
cada vez mas se me aleja
porque se que me queda poco tiempo
aunque no lo parezca

Porque al cerrar los ojos
siento el frío de cerca
quiero que guardes mi foto
detrás de tu puerta

Cuando muera enterradme
sobrio y ameno
y que así sepan
que morí sin fama ni dinero

Quiero un traje negro
y mis zapatos blancos,
un pañuelo rojo
y un sombrero barato

Que ese día
cuando pasen por el cementerio
vean diez hombres entrando
y nueve saliendo

 

La muerte es, después de todo, inevitable;no importa cómo, pero llega tarde o temprano.Solo queda vivir.
Expresivo poema, armonioso.La ultima estrofa no lo entendí bien:...."diez hombres entrando y nueve saliendo"
Saludos, bienvenido.

 

Y es en la muerte que las definiciones sobran, los actos. Es en este día, en esta hora, en estos minutos que la valía se basa en el recuerdo exacto en las mentes de los que rodean el lugar de descanso, la tumba santificada en el fuego mismo de la pasión.

Un abrazo eterno...

 

Bellos, sencillo, buen poema. saludos cordiales