Al cabello de una extraña

Como cae la noche suave y lene
por que el mar y la tierra se solacen
y las pasiones con los sueños lacen
un compromiso pródigo y perene,

caen, por que mi llanto se serene
y mis ojos sutil placer abracen,
en salto de que bucles miles nacen
tus hebras, do el amor alcoba tiene.

Puesto que no las lasas manos puedan,
marchad vosotras, hijas de mi engenio,
a acariciar con dedos invisibles

los primores que el ébano remedan,
e inundad con su aroma primigenio
del mundo los espacios concebibles.

Que las rocas terribles
en sedas volverán sus acritudes
y sus faltas en pulcras celsitudes.​

 

Un estupendo trabajo, como otros que ya te he leído. Mis felicitaciones
Un abrazo, estrellas y reputación.

 

Que gran categoría les imprimes a tus versos amigo, un placer pasar por acá, un fuerte abrazo...

 

Excelente trabajo mi buen amigo exquisita lectura, mis saludos cordiales

 

Excelente soneto, estimado Littera,
tiene mi APTO;
(te corregí una palabra que va junta),
un saludo cordial,
edelabarra

 

Hola littera:
Deisfruto siempre tus muy bien elaborados versos, felicidades por el presente trabajo.
Apapachos: Miguel