Al Crucificado

Al Crucificado

Padre, ¿Qué somos?, monstruos, larvas, simples.

Cada latigazo,
cada golpe,
cada clavo,
cada mirada,
cada escarnio,
cada escupitajo.

Mereciamos tanto,
Señor ¿Porqué?

Haznos pagar,
Una y otra vez
Mil veces.

¿Porqué se condenó al justo?
cada gota de su sangre
caía despacio, girando,
como una tormenta.

Que hombre tan Dios fuiste

Tus palabras,
condenan no por su fuerza,
si no por su precisión,
que disciernen hasta el alma.

Te hicimos nuestro Rey,
te adoramos con hipocresías,
nuestro júbilo mentía
y nuestras simuladas canciones
no engañaban tus sentidos.

Te coronamos con espinas,
y te entronamos en una cruz,
tu cetro fueron clavos,
te vestimos de latigazos.

Nos atrevimos a juzgarte,
y te condenamos a nuestra muerte.

La madre natura, y la sumisa muerte,
dedujeron tu divinidad y se negaron
contenerte entre nosotros.

 

Buenos versos que dejan mensaje importante para que cada cual se lo aplique según su estatus,
para pensar desde luego es.
Abrazos amigo.

 

Mil gracias por leerme Lola,