Al fuego eterno

Teniendo el momento
voy a atraparte,
como una sombra
bajo la luna de plata,
y caeré sobre tus ojos
de cristal divino.

Preciso encontrarte antes
que el vendaval de subjetividades
desorganice la quietud del mundo,
con armas de murmullos estelares.

Anhelo tu cabello crespo en mi
pecho desnudo descansando,
o cuando beso tu frente
inundada de bellos pensamientos.

Atento a tu pesar persigo tu alma
por las estrellas, por planetas,
rincones cententuriales
de las cósmicas epidemias,
-atento a tu sonrisa te descubro-
donde millares de almas prisioneras
fueron sentenciadas
al fuego eterno del amor,

Y simplemente resumiera allarte
a buena hora cuando estés pensándome.
Teniendo el momento
voy a buscarte,
y llegarás temprana a mí camino
entonces venceremos nuestros miedos,
y
quizás podamos, empezar de nuevo...