Al proletariado

Atrás de la cortina
vivo anclado a la rutina,
siempre una monotemática
rabieta despertina.

Rutina y más rutina,
estoy anclado a la rutina,
hago de forma automática
el mismo trabajo de por vida.

Con un sueldo insuficiente
echo unas 10 horas al día,
pues quiero comer caliente,
quiero un techo y agua fría.

Proletario un paso al frente,
proletario el puño arriba,
la guerra aún sigue presente,
entre el obrero y burguesía.

Quiero un mundo diferente,
al que han tachado de utopía,
quiero mundo el cual gobierne
nuestro amor y la empatía.

quiero un mundo
en el que me despierte
y justo me sonrías,
voy a siempre agradecerte
acompañar mis malos días,
puede que no siempre acierte
en mi ignorante habladuría,
tengo suerte de tener
alguien con tal sabiduría.



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