Ama Mia, Maestra y Señora

Ama mía , señora y maestra por siempre serás, nunca más tristeza verás, la penumbra cantará y tu llanto se irá, un camino errante tomarás y tu andar no os cegará, la colina espera el susurro de tu silencio, ama mía.
Sueña en cantos nebulosos dignos de grandes elfos, baila sobre la luz de tus intimas compañeras que versos contrapuestos dan a su maestra enseñar, corre lentamente sobre un firmamento terrenal que tu misterio y soledad nunca entenderá el que no te llegue a contemplar, ¡Que sola y triste estas! Tu luz no brilla más ¿Puede un mortal verte brillar en su sobriedad?
Por siempre lo sabrás, más nunca lo verás ni entenderás, tu belleza cantará sin el alba rebosar, la montaña te amará, la montaña te engendrará; lluvia sobre ti, hombres bajo tu luz, seres en celesta de azulado resplandor bailan en torno de si, pretenden acariciar tal grandeza, pero saben lo inalcanzable que es a lo terrenal.
¿Cuánto dolor más? ¿Cuántas luces verás apagar? Osado aquel que hace alarde de alabarte, una petición escucharás y miles cumplirás, en suavidad y frialdad tu piel mojada está. Lagrimas propias y ajenas por una misma y única razón son derramadas en tu esplendor. Oscuridad en rededor, luminosidad al interior, no dejas de profesar que al final se contaran las almas, las cortezas dejarán de importar.
Milagro y regalo cósmico es que brilles aún, en tu soledad seguirás, más aún, es tu compañía filial; sonetos vagos y alucinantes os han sido dedicados, seres de tu ancho mundo y de otros más, tratarán de comprender tal diferencia, ninguno lo logra y muchos dicen hacerlo, quizá sea cierto, pero tal sin igual no tiene descripción simple ni compleja en dialecto mortal; un sentir, una expresión de comprensión y compañía, es solo una más en tu listado memorial de admiraciones y adoraciones recibidas, pues no hay ni habrá nunca un misterio tan profundo e incomprensible como el de la permanencia de tu luz en el mar apacible.​

Que las Energias del Cosmos y Mi Mundo Verde os acompañen. Ireth Tasardur, Señora del Corazon del Bosque.

 

Irethisa:

un bello escrito, con algunas partes poéticas y otras en prosa, pero profundamente emocionales y con algunas bellas imágenes.

Un saludo cordial

Jaime