Amiga soledad

Estuve recordando los pasos que he dado en esta vida,
recordando miles de errores, caídas y desdichas transformadas en golpes,
golpes que impactaron en mi cara dejando sus marcas a la vista.
Estuve recordando tu voz guiándome por caminos que recorrí junto a ti a ciegas,
apoyándome en tus manos,manos que me retuvieron en ese mundo
en el que perdí la vista por tanta oscuridad;
recuerdo tu pelo jugueteando en mi rostro mientras robabas besos de mi boca,
mientras enterrabas tus uñas en mi pecho como espada en la roca;
te recuerdo violando la intimidad de mi cuerpo,
excitándome en esa cama donde robabas hasta mis más ocultos secretos;
recuerdo tu boca haciéndole un bosquejo a mi cuerpo,
tus dientes dejando mordidas en mí como si dejara huellas en la arena;
siento aún en este cuarto frío el calor de tu aliento, ese que se volvió parte de mí,
siento como tu lengua recorre mi espalda estremeciéndome de placer,
siento como combinas tu pecho con el mío, como entrelazas tus piernas con las mías,
te siento aún disfrutando mi vientre, mis brazos, mis muslos;
te siento trazar figuras con tu lengua en mi pelvis
y retozando con mi cuerpo a tu antojo.
Recuerdo de forma placentera tu desenfreno al hacerme el amor,
aventuras intensas difíciles de olvidar;
más también recuerdo ser esclavo de tu cuerpo, de tus deseos,
tus caprichos y sobretodo de tus celos.
También llegan a mi mente los recuerdos de las noches en las que nos insultábamos
mutuamente como hienas devorando su presa
y las llagas en mi muñeca secuelas del encierro que sufrí en tu paraíso infernal.
Me quisiste sí, como lo sigues haciendo,
pero esos celos enfermizos, ese egoísmo contagioso son como películas
que se reproducen en mi mente como recordatorio.
Hoy me suelto de tus amarras, me fugo de tu prisión,
camino en dirección del viento y te saco de mi corazón.
Hoy me libero de tu cuerpo, de tu amor enfermizo,
de tus pasos y tus cadenas, hoy me libero de tu hechizo.
A partir de ahora te saludaré desde la distancia que nos ha de separar,
más nunca me olvidaré de ti, mi amiga soledad.

 

Muchas gracias amiga, me gustó tu criterio. Gracias por estar entre mis letras presentes para ayudar a mejorar las huellas que dejo con estas palabras.